lunes, 23 de septiembre de 2013

hoy me castigo sin salir

Me muero por un trago de algo 
que me haga olvidar. 
Si hubiera conocido por lo menos 
la panacea que me tranquilizara a tragos. 
Pero nunca he encontrado nada 
que me dé la paz, 
nunca he podido engancharme a algo. 
Nada me sirve, 
no me ofrece lo que debería, 
me miente desde la primera dosis. 
Y así no hay quien se drogue. 
Si no lo oculta ni un momento. 
Si no puede acallar 
los rugidos del dragón biliar 
no lo vuelvo a comprar. 
Para eso me quedo en casa 
y me castigo sin salir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario