sábado, 27 de junio de 2015

Tengo hambre

Tengo hambre, 
o es todavía la vergüenza que me come por dentro?
Sí, 
es la vergüenza,
aunque también tengo hambre.
Vergüenza y hambre,
la mezcla perfecta 
para dejar de hacer yoga por la mañana, 
prometiéndome a mí mismo 
que lo haré en otro momento 
a lo largo del día.

¡Mentira!

No te lo creas,
no te creas a ti mismo.
Te estás mintiendo,
te estás engañando.
No dejes para luego
lo que tienes que hacer ahora.
Aunque sientas vergüenza,
aunque tengas miedo,
aunque tengas hambre,
aunque no le encuentres el sentido.
Sí lo tiene.
Sigue luchando.
No cedas ante las excusas de tu mente enferma.

domingo, 21 de junio de 2015

El dicho se equivoca.

Hay que vivir cada día, 
no como si fuera el último, 
sino como si fuera el único.

por su propio peso

Mantente en las pequeñas cosas.

Mantente en los desayunos, 
en las meriendas, 
en la limpieza y el orden 
de juguetes tirados por el suelo. 

Manténte en la realidad, 
en las cosas que pesan, 
que se tocan, 
que se rompen, 
que tienen forma y color. 

Mantente en lo material, 
en lo orgánico, 
en lo inevitable 
y en lo imprescindible. 

Y deja que lo demás caiga por su propio peso.

Mi palabra no es sagrada

Mi palabra no es sagrada,
mi cuerpo no es un templo,
mi cara no es el espejo de nada,
mi culo no se deja dar patadas.

Mi mente, 
ni existe,
ni es consciente.
Mi piel
no se vende.
Ni por uno,
ni por cien.

miércoles, 10 de junio de 2015

Siéntate

Cuando pienses que ya no me quieres,
vuélvelo a pensar.
Porque te estarás equivocando.
Cuando digas que te vas,
desdícete.
Yo haré como que no lo he oído.
Cuando sientas que te has ido,
vuelve.

No me dejes.

Quédate.
Quiéreme.
Háblame.
Piénsame.
Siénteme.

Siéntate.