miércoles, 2 de abril de 2014

mi reina caníbal

Cómeme el alma a bocados. 
Quiero que me engullas sin compasión, 
que no dejes ni un pedazo de mi carne sin morder, 
sin amoratar, 
sin ensangrentar. 
Necesito saber que no puedes sobrevivir 
sin un pedazo de mi carne entre tus dientes. 
Necesito sentir que necesitas esta sangre, 
que todavía tienes hambre, 
que aún caminas sobre el alambre, 
que no pertenecemos todavía al enjambre, 
que no me has embutido, 
convertido en fiambre. 
Muerde, 
mi reina caníbal.

No hay comentarios:

Publicar un comentario