Casi consigo escribir algo,
no lo consigo,
pero casi.
Estuve casi ahí,
he estado en la frontera de lo congruente,
a veces,
he mirado a través de los barrotes
y he visto un mundo con sentido,
he visto a cosas crecer y multiplicarse,
con orden,
he olido las fragancias de una vida feliz.
Estoy cansado,
hambriento,
desesperado.
Y eso sin haber pasado hambre
ni haber dado un palo al agua.
Nunca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario